Edificios sanos: Hay una relación entre la biología y su entorno por lo que los edificios deben ser saludables para no empeorar el estado psicológico de los usuarios.
Clima-Hombre: Las condiciones atmosféricas condicionan el trabajo mental y físico del hombre. Cuanto menor sea el esfuerzo del organismo para mantenerse entre los 36,5º y los 37º estaremos más cerca de nuestra zona de confort. Factores que influyen, la temperatura del aire, la radiación, el movimiento del aire o la humedad relativa. La orientación también es muy importante para la eficiencia de una construcción y depende de la zona donde esta se sitúe.
Diseños sostenibles: Bioarquitectura, minimiza los impactos negativos de las construcciones. Edificios de bajo consumo energético con materiales no nocivos. Inercia térmica ventilación e iluminación natural. Control del microclima con medidas pasivas, orientación adecuada, tipología que favorezca la ventilación natural, inercia térmica…
Materiales: El uso de materiales tradicionales garantiza unas condiciones de mayor salubridad y bienestar que los modernos materiales sintéticos.